Receta de Purrusalda

Pelamos los dientes de ajo, y los reservamos.

Pelamos, lavamos y troceamos las patatas en finas lonchas, y las ponemos en un bol cubiertas de agua para que no se oxiden. Reservamos también.

Cocemos el bacalao en 1/2 litro de agua durante unos 7 minutos. Una vez listo, reservamos el agua de la cocción y desmenuzamos el pescado, procurando eliminar toda su piel y sus espinas. Reservamos.

A continuación, en una cazuela honda, calentamos aceite al fuego y freímos los dientes de ajo que tenemos reservados hasta que se doren. Cuidado, que se nos quemen, pues se ponen marrones oscuros muy rápidamente, y si esto pasa, la purrusalda no sabrá bien. Retiramos los ajos una vez listos, y los apartamos para usarlos luego.

Lavamos los puerros, los cortamos en rodajas y los añadimos a la cazuela, donde habremos dejado el aceite de freír los ajos.

Ahora, escurrimos e incorporamos las patatas. Rehogamos un poco.

Pelamos las zahorias, las cortamos en rodajitas y las echamos a la cazuela. Rehogamos ligeramente removiendo de abajo a arriba.

Tendremos la cazuela al fuego unos 5 minutos, e iremos removiendo de vez en cuando.

Ahora le toca el turno al pescado; echamos en la cazuela el bacalao que teníamos reservado y un poco de pimienta molida.

Vertemos también en la cazuela el agua donde hemos cocido el bacalao.

Los últimos pasos que vamos a dar en la preparación de la purrusalda, consisten en majar los dientes de ajo dorados junto con una pizca de pimentón. Diluimos este majado con un poco de agua hirviendo y lo añadimos al guiso.

Rectificamos de sal si fuera necesario, y dejamos que cueza a fuego lento durante media hora más antes de retirar del fuego.

Foto orientativa: La.blasco

La purrusalda es un receta típica de otoño y de invierno, pues hay que servirla caliente.