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¿Que no conoces el turducken? ¡No me lo puedo creer! Pavo relleno de pato relleno de pollo. Vas a quedar de lujo en las comidas de estas fiestas.
Solicitamos a nuestro carnicero de confianza que nos deshuese el pavo, el pato y el pollo, dejando tan solo los huesos de las patas y las alas. Ya tenemos solventada la mayor dificultad de la preparación del turducken. ¡Qué alegría!
Las piezas nos han quedado vacías por dentro, sin carcasa, de manera que se pueden extender abiertas boca arriba, casi formando un manto liso, que luego iremos rellenando.
Así que a preparar el relleno del turducken toca. Pero antes hemos de dejar toda una noche las carnes marinando en un buen recipiente con el azúcar moreno, la sal y cubiertos de agua. A la mañana siguiente, sacamos, secamos y ya tenemos las aves listas para elaborar nuestro pavo relleno de pato relleno de pollo (me encanta decirlo así).
En un buen bol, amplio, que nos permita trabajar con facilidad, desmigamos el pan blanco y añadimos la carne picada. Salpimentamos al gusto, añadimos un toque de salvia y un poco de romero e incorporamos una taza de caldo concentrado caliente, en el que habremos disuelto la mantequilla. Trabajamos con las manos limpias, hasta que nos quede una masa. Ese es el relleno del turducken.
Colocamos el pavo abierto panza arriba y extendemos sobre él una capa de relleno. A continuación colocamos sobre el pavo abierto relleno, el pato panza arriba y también le extendemos una capa de relleno. Por último, colocamos sobre el pavo relleno cubierto con el pato relleno, el pollo panza arriba y lo cubrimos con otra capa de relleno.
Ojito con la cantidad de relleno que ponéis en cada capa o acabaréis teniendo que embridar a godzilla. Sí, hemos llegado al punto en que hemos de cerrar el turducken y devolverle el aspecto de un pavo.
Para ello hemos de ayudarnos de hilo de cocina y que alguien te eche una mano para poder ir cerrando las aves. Se trata de que cerremos primero el pollo con su contenido dentro. A continuación cerramos el pato y por último el pavo relleno, que debe contener a todo lo demás.
Con el hilo de cocina vamos atando el turducken, hasta que lo hayamos dominado y nos quede con la forma del pavo original, por eso era tan importante no pasarse con la masa del relleno.
Una vez atado todo el tronco, ata también las patas para que conserve la forma del pavo y vamos a la cocción. Untamos el pavo por fuera con aceite de oliva y lo colocamos en una fuente de hornear.
Llevamos el turducken al horno precalentado a 260ºC y dejamos cocinar durante un cuarto de hora, para que la piel quede tostadita y, a continuación, bajamos la temperatura hasta los 100ºC y dejamos cocinar muy lentamente durante tres horas y cuarenta y cinco minutos.
Para asegurarnos de que el turducken está en su punto podemos insertar un termómetro de carne en el centro de la pieza, por la parte del relleno. Cuando alcance los 75ºC estará listo.
Es importante que durante el asado, vayamos retirando el exceso de líquido que pueda soltar en la bandeja de hornear. Una vez listo, servimos trinchado en rodajas.
Foto orientativa: Nate Vack
El turducken en un plato muy popular, sobre todo en la cocina anglosajona. Tal vez lo más difícil para quienes sean más puristas a la hora de elaborar este pavo relleno de pato relleno de pollo sea deshuesar las aves, pero ¡estamos en la era moderna y contamos con unos carniceros maravillosos, dejemos que ellos se ocupen de esta parte!