Harina de avena, yogur, cáscara y zumo de limón, azúcar y huevo, son los ingredientes necesarios para hacer un bizcocho de avena esponjoso y lleno de sabor.
Si lo que queremos hacer son bizcochos fitness de avena, o bizcochos proteicos, en la nota de autor adjuntamos unos vídeos con los que conseguir ideas de distintos bizcochos de avena, además de queques de avena de distintos sabores.
Preparamos la masa de nuestro bizcocho de avena:
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Comenzamos la receta separando las claras de las yemas y colocándolas en boles diferentes.
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Una vez separadas, batimos bien las yemas e incorporamos a ellas los yogures, la ralladura bien fina de limón y un par de cucharaditas de zumo de limón. Batimos bien hasta que todo esté bien integrado.
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Aparte, vamos a montar las claras con la sal a punto de nieve (con la ayuda de las varillas de la batidora lo haremos más rápido). Cuando hayan subido mucho, o sea estén a punto de montarse, añadimos el azúcar y seguimos batiendo para integrarlo todo y conseguir un merengue bien firme.
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Añadimos la mezcla de las yemas al bol de las claras y mezclamos con movimientos envolventes y con cuidado para intentar que las claras se bajen lo menos posible.
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Mezclamos los polvos de hornear con la harina de avena, y los agregamos a la masa. Volvemos a mezclar con movimientos envolventes. La masa del bizcocho de avena estará lista cuando no veamos restos de harina en ella (ni grumos)
Horneamos el bizcocho de avena y yogur:
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Calentamos en horno a 180ºC.
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Echamos la masa del bizcocho en un molde que habremos engrasado y enharinado si fuera necesario, le echamos por encima unos copos de avena y lo llevamos al horno durante unos 35-40 minutos a 180ºC.
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Para saber si el bizcocho está listo, a los 30 minutos abriremos la puerta del horno, rápidamente pincharemos en el centro con un cuchillo o un palo de brocheta y volvemos a cerrar el horno para que pierda calor. Si sale limpio es que el bizcocho de avena estará listo, si sale manchado lo dejamos 5 minutos más... Repetiremos esta operación tantas veces como sea necesario hasta que el cuchillo salga limpio.
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Una vez listo sacamos el bizcocho del horno, lo dejamos que se temple dentro del molde y lo desmoldamos. Dejamos que enfríe mejor sobre una rejilla para que respire y no se humedezca la parte que toca la mesa o el plato donde lo coloquemos para enfriarse... Listo, ya tenemos un delicioso bizcocho de avena sin grasa con un riquísimo sabor a limón.
Un desayuno equilibrado y delicioso: avena con yogur y frutas del bosque variadas (fresas, frambuesas, grosellas, moras, etc.). ¡Para empezar el día bien!
Deliciosa avena con pimientos, puerro y pollo. Bastará con saltearlo todo en la sartén, y ya tendremos un completo plato, con el que te llenarás de energía.