Receta de Krapfen

Para hacer la masa de los krapfen, empezamos volcando toda la harina en un bol mezclada con el azúcar, la canela, la nuez moscada y una pizca de sal, hacemos un volcán, y añadimos los ingredientes líquidos: la levadura disuelta en la leche tibia, la mantequilla semidisuelta y la esencia de vainilla.

Mezclamos los ingredientes del krapfen, y cuando la masa esté homogénea, la metemos en un bol limpio, lo tapamos con un trapo húmedo, y lo dejamos reposar en un ambiente cálido durante una hora y media, aproximadamente.

Llegados a este punto, vamos a amasar durante unos 5 minutos, para después dividir la masa en bolas del tamaño de una pelota de tenis, que dejaremos reposar tapadas sobre una bandeja engrasada hasta que doblen su volumen.

La masa de los donuts krapfen hay que freírla en aceite de oliva, y cuando estén doraditos por fuera los sacaremos y los dejaremos escurrir sobre papel absorbente.

Mientras, haremos el relleno de los krapfen montando la nata junto con el azúcar.

Con todo listo, abriremos los krapfen a la mitad y los rellenaremos de nata montada. Al final, basta con espolvorear azúcar glas sobre los bollos rellenos, y ¡a disfrutar de este rico dulce!

Foto orientativa: Michael_reuter

Algunos conocen a los krapfen como los donuts alemanes por estar hechos con una masa parecida que también se fríe, pero los krapfen no tienen agujero y suelen ir rellenos casi siempre.