Receta de Masa para pasteles

Comenzamos la preparación de la masa para pasteles, tamizando la harina, la sal y la levadura. La ponemos en la mesada y formamos un volcán con estos ingredientes mezclados.

En el centro echamos la matequilla, que deberá estar a temperatura ambiente, y una taza de agua. Vamos obrando los ingredientes, hasta conseguir una masa para pasteles fina y fácil de trabajar. El punto adecuado será cuando la masa se separe fácilmente de la superficie de trabajo.

Extendemos la masa, con la ayuda de un rodillo enharinado. Hacemos una lámina fina y la espolvoreamos con harina. La untamos con un poco de mantequilla y salpicamos de harina. Volvemos a amasarla.

Ya tenemos la base lista para que podamos cortarla y poner encima cualquier ingrediente que dé dulzor a la masa: dulce de batata, dulce de membrillo, pepitas de chocolate, azúcar cristalizado, fruta escarchada, dulce de leche, fruta fresca... Luego la metemos al horno hasta que la masa esté dorada y cocinada.

La masa para pasteles puede freírse en abundante aceite caliente y decorarla una vez frita, aunque sólo espolvoreada con azúcar glas está deliciosa.

Foto orientativa: Christine Rondeau

Esta elaboración es más apropiada para masa para pasteles tipo hojaldrados. Aún así, quedará deliciosa como base para otras elaboraciones, siempre que tengamos en cuenta el incorporar, en otros casos, azúcar a la preparación.