Receta de Pizza romana

Para elaborar esta suculenta pizza romana, tenemos que preparar en primer lugar la masa y para eso, en un bol, mezclamos la harina, el azúcar y la sal.

Una vez bien mezclado, hacemos un hueco en el centro a modo de volcán y en él, vertemos el aceite junto con la levadura, que ya tendremos disuelta en el agua templada.

Mezclamos todo muy bien, primero con una espátula o lengua de cocina y cuando los ingredientes estén integrados, pasamos la masa a una superficie de trabajo y seguimos amasando, ahora con las manos, hasta conseguir una mezcla homogénea y suave.

Damos forma redondeada, la metemos en un bol cubierto de harina y tapamos con un paño de cocina. Dejamos que repose unos 30 minutos.

Pasado ese tiempo, ponemos el horno a calentar a 200ºC y mientras se calienta, volvemos a pasar la masa a la mesa de trabajo ligeramente enharinada. Desgasamos ligeramente y estiramos con la ayuda de un rodillo.

Cuando la masa de la pizza romana tenga un grosor de aproximadamente 1,5 cm. la pasamos a una bandeja para el horno forrada con papel vegetal y ahí, damos forma circular colocando las manos en el centro de la masa y las vamos girando hacia los extremos de forma que los bordes nos vayan quedando más gorditos.

Ahora, montamos la pizza romana y para eso, extendemos el tomate frito sobre la masa hasta dejarla cubierta por una fina capa, esparcimos las las especias, la mozzarella rallada. Colocando las rodajitas de tomate, los champiñones (ya limpios y laminados), el jamón cocido cortado en cuadraditos y las aceitunas partidas a la mitad.

Metemos nuestra pizza casera en el horno durante unos 12 minutos, y ya tenemos nuestra pizza romana lista para servir, bien caliente y acompañada de nuestra bebida favorita.

Foto orientativa: mrkalolo