Los carquiñoles son un dulce típico de Cataluña, hecho a base de pan duro con azúcar y frutos secos. ¡Una merienda rica, original y muy sana para tus niños!
Empezamos trabajando la masa de los carquiñoles en un bol, donde mezclaremos la harina tamizada con la levadura y la canela.
Aparte batiremos el huevo junto con el azúcar glas de forma insistente, hasta lograr una masilla bastante densa. Entonces lo añadiremos al bol con la ayuda de una lengua. Por último, echaremos las almendras, que habremos tostado previamente en una sartén con cuidado de que no se nos quemen.
La masa de los carquiñoles la trabajaremos luego sobre la encimera limpia y con una ligera capa de harina, donde la aplastaremos hasta lograr un grosor de dos centímetros. Luego la pondremos en la bandeja del horno sobre papel de hornear, y la hornearemos a 180ºC (horno precalentado) durante 25 minutos.
Hecha la barra de los carquiñoles, hay que dejarla enfriar unos cinco minutos antes de cortarla en rodajas de un centímetro y medio, más o menos. De esta forma, volveremos a meter los carquiñoles en el horno, durante 12 minutos más.
Hechos los carquiñoles, hay que dejarlos secar y luego envolverlos con papel que transpire.
Foto orientativa: Tamorlan
Conocidos como carquinyolis en Cataluña, los carquiñoles son un dulce de bizcocho duro que bien pueden servirse como turrón en Navidad.
Los carquiñoles también se pueden hacer con avellanas, pistachos, y otros frutos secos.
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