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- Receta de empolvados
Harina, levadura, huevos y azúcar, son los ingredientes que se necesitan para hacer estos típicos dulces chilenos, que rellenaremos de lo que más nos guste.
Para que los empolvados tengan esa esponjosidad que los caracteriza, vamos a separar las claras de las yemas, y batiremos a punto de nieve las primeras.
Una vez que las claras ya forman picos, añadimos la mitad del azúcar y volvemos a batir hasta conseguir un merengue fino y firme.
Aparte, en otro bol echamos las yemas de huevo con el azúcar que nos quedaba, y las batimos hasta que doblen su tamaño.
En otro bol tamizamos la harina con el polvo de hornear y reservamos.
Añadimos al bol de las yemas 1/3 de las claras y 1/3 de la harina y vamos mezclando con una cuchara de forma envolvente de abajo hacia arriba.
Repetimos la operación otras 2 veces hasta terminar con todas las claras y toda la harina.
Una vez que tenemos la masa perfectamente homogénea y todos los ingredientes de los empolvados chilenos están perfectamente integrados, echamos la masa en una manga pastelera y procedemos a darle forma a los bizcochos que formarán nuestros empolvados con manjar una vez horneados.
Encendemos el horno a 180ºC para que esté bien caliente cuando vayamos a meter los empolvados en el horno.
Colocamos una lámina de papel parafinado o papel de hornear sobre la placa del horno, y en él repartimos montoncitos de masa dejando una separación entre ellos de unos 3-4 centímetros. Hacerlos más grandes o más pequeños es al gusto de cada uno, lo que sí debemos intentar es que todos los circulitos queden más o menos del mismo tamaño.
Metemos los empolvados en el horno durante unos 10-15 minutos (dependerá mucho del tamaño y del horno, pero los sacaremos cuando veamos que están un poco doraditos)
Los sacamos del horno y los retiramos del papel con ayuda de una espátula.
Untamos un bizcochito con manjar (si quieres hacer los empolvados tradicionales), con crema de chocolate, con mermelada de frutos rojos o con leche condensada y coco rallado (elegir el relleno que más nos guste) y cubrimos con otro bizcocho.
Echamos un buen poco de azúcar flor en una bolsa, metemos un empolvado dentro de ella, y lo movemos para que el azúcar se peque por todas partes... y listos para comer.
Foto orientativa: CocinAlegre
Disfrutar de las deliciosas curavier es muy sencillo, pues sólo hay que mezclar los ingredientes, dar forma, hornear ¡y listo!