Receta de sabor potente y un grado de aceptación a prueba de paladares exigentes. Hacer este lubrigante con arroz es sinónimo de triunfar en la cocina.
Empezamos cortando la cebolla y el pimiento rojo muy picaditos. Reservamos.
Si queremos que el lubrigante con arroz nos quede muy sabroso, lo primero que tenemos que hacer es abrirlo a la mitad con un corte longitudinal (si está vivo, se debe hacer el corte estando vivo) y marcarlo en la misma sartén o cazuela donde luego vamos a cocinar el arroz, para aprovechar todos los jugos.
Marcar el lubrigante quiere decir hacerlo por un poco con unos hilos de aceite de oliva hasta que la carne coja color dorado, y un tiempo similar por el lado del caparazón.
Hecho esto, extraemos con cuidado la carne del cuerpo del lubrigante y la reservamos.
La cabeza, el caparazón y las pinzas, las echamos en un cazo con 1,5 litros de agua, y cocemos durante 20 minutos, hasta tener un sabroso caldo o fumet de pescado. Una vez hecho, sacamos las pinzas, y trituramos todo lo demás. Por último, colamos el fumet.
En la cazuela, añadimos un poco más de aceite de oliva, y sofreímos el pimiento y la cebolla. Cuando estén sofritos, echamos el tomate concentrado y el arroz, y lo rehogamos durante un par de minutos con la verdura, antes de echar el fumet (en volumen, el doble de fumet que de arroz), añadir unas hebras de azafrán y sal al gusto.
Al cabo de 12 minutos, o cuando el arroz esté al punto, añadiremos la carne y las pinzas al arroz con lubrigante, lo apartaremos del fuego, lo taparemos con un paño, y lo dejaremos diez minutos más.
A la hora de emplatar el lubrigante con arroz, añadiremos en cada plato un chorrito de aceite verde que haremos con un licuado de aceite de oliva y perejil, bien triturado y colado.
Foto orientativa: Garrett Ziegler
Ojo con la sal que añadís al arroz, porque el lubrigante aporta por sí solo mucho sabor al plato.
Uno de los mariscos más apreciados del mundo, también conocido como bogavante, abierto a la mitad, aderezado ricamente y cocinado a la plancha. Es soberbio.
El ajo, el laurel, la cebolla, el aceite de oliva, y sobre todo, la forma de hacerlo, le dan a esta receta de arroz blanco un punto genuino de sabor único.
Un plato completo, rico y fácil de hacer que lleva plátano frito, huevos fritos, arroz aromatizado con ajo y tomate frito. Un éxito entre los niños.
Arroz con pollo, una buena variedad de verduras, un toque de leche y azafrán. Un plato al estilo tradicional rico rico y sano sano.
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