Los sabores afrutados siempre vienen bien con este tipo de carne, así que la pechuga de pato con salsa de arándanos es algo que no puede fallar.
Para empezar a preparar esta pechuga de pato con salsa de arándanos vamos a poner al fuego una sartén con aceite de oliva y la cebolla bien picada, además de una pizca de sal.
En cuanto la cebolla empiece a pocharse, añadimos dentro las dos pechugas de pato, poniendo primero la piel para abajo. Cuando la piel esté dorada, damos la vuelta y doramos por el otro lado.
Retiramos las pechugas de pato de la sartén y agregamos dentro los arándanos, aplastándolos un poco. Incorporamos, tras cocinar durante unos minutos, el caldo de verduras y la mermelada de fresa.
Salpimentamos un poco y movemos todo bien. Machacamos para que los arándanos queden bien aplastados.
Reincorporamos las pechugas dentro de la sartén y las cocinamos, a fuego medio, durante diez minutos más.
Añadimos un poco más de sal sobre las pechuga de pato con salsa de arándanos y servimos.
Foto orientativa: Naotakem
La pechuga de pato con salsa rosa es un plato sorprendentemente fácil de hacer y, además, casero a más no poder.
Deliciosa combinación entre dulce y salado la que encontramos en este plato de pechuga de pato con arándanos.
La salsa de arándanos se ha convertido desde hace tiempo en fiel compañera de la carne de parto. ¡Pues por algo será! Tan fácil como sabroso.
Pechugas de pato, pavo o pollo doradas y acompañadas con una deliciosa salsa agridulce de caldo de carne, oporto y miel.
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