Magníficos raviolis de pasta fresca casera con relleno personalizado, que se podréis acompañar con vuestra salsa favorita. ¡Más fácil de lo que crees!
El comprar el relleno hecho, nos centramos en la elaboración de la pasta de los raviolis rellenos. Para ello, tamizamos la harina en un bol, añadimos una pizca de sal, y luego echamos los huevos enteros. Mezclamos hasta obtener una mezcla uniforme que guardaremos en el frigorífico durante 60 minutos.
Estiramos la masa de los raviolis en una superficie lisa, limpia y enharinada, hasta obtener una lámina fina, la dividimos en dos partes, y en una de ellas colocamos pequeñas cucharaditas de relleno. Tapamos con la otra masa, y cortamos los raviolis (normalmente, se suelen hacer cuadrados).
Para unir los bordes de los raviolis rellenos, pintamos con agua con una brocha y dejamos presionamos.
Ponemos agua a hervir, y echamos los raviolis uno a uno con mucho mimo, para dejarlos cocer durante unos 4 minutos.
Podemos acompañar los raviolis rellenos con la salsa para pasta que más os guste.
Foto y fuente: Cocina.es
En el caso de estos raviolis me decanté por un paté de oca para el relleno, pero por supuesto, existen multitud de opciones para el relleno: un sofrito de gambas con cebolla caramelizada, espinacas con uvas pasas o piñones, carne picada con sofrito de cebolla, setas, etc.
Ideal para la temporada de setas, unos raviolis rellenos de perdiz cocidos en caldo de jamón, con boletus al ajillo y perfumados con trufa negra.
Una forma deliciosa de acompañar a los raviolis rellenos de queso, con una suave salsa creada a partir de setas, dátiles, nuez moscada y nata.
Estos raviolis dulces rellenos de rico queso ricotta, son un original entrante perfecto para una comida o cena entre amigos.
Raviolis caseros de espinacas y queso fresco ricotta, perfectos para acompañarlos con la salsa que más nos guste. Ideal para que los niños coman verduras.
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