Sardinas, ajos, aceite para freír, sal, y ya tendremos todo lo necesario para preparar unas fantásticas y espectaculares sardinas al ajillo fritas.
Cuando vayamos a preparar estas sardinas al ajillo, el primer paso que daremos será limpiar bien las sardinas, quitándoles las tripas y demás restos (si lo han hecho en las pescadería mejor), y frotándolas suavemente bajo el chorro del agua, para quitar el mayor número de escamas. Después, las secamos un poco con papel absorbente y les echamos sal.
El siguiente paso para cocinar las sardinas al ajillo, será pelar los dientes de ajo y laminarlos. A continuación, ponemos una sartén al fuego con abundante aceite y, cuando esté caliente, introducimos los ajos y los freímos hasta que estén dorados. En ese momento, los sacamos del aceite y los desechamos.
Introducimos el pescado en el aceite, y lo dejamos hacer, por ambos lados, hasta que las sardinas estén doraditas. A medida que se vayan haciendo, las iremos colocando sobre papel absorbente.
Así, ya tendremos las sardinas al ajillo fritas listas.
Foto orientativa: Zé Carlos Barretta
Si eres de los que disfrutan del pescado, pero no puedes dedicarle mucho tiempo a la cocina, esta rica receta de sardinas asadas al ajillo, es para ti.
Rebozadas con ajo, perejil, harina y huevo, vamos a hacer unas ricas sardinas acompañadas de una suave y deliciosa salsa de tomate frito. Está buenísimo.
Sardinas frescas en escabeche de vinagre y vino con cebolla roja. Una refrescante, fácil, sabrosa y rápida tapa para tomar en cualquier momento.
Fresquísimas sardinas hechas con jugo de cítricos, riquísimas para tomar solas, en pintxos o en tostas. Ideales como aperitivo acompañadas de una cerveza.
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