Diuréticas y sanas, su ausencia de grasas y su bajo aporte calórico las hacen ideales para quienes deseen cuidarse y disfrutar con unas ligeras alcachofas.
Las alcachofas ligeras estarán más ricas si antes nos hemos preocupado de limpiarlas bien y retirar las partes más fibrosas y duras. De este modo, comenzaremos por quitar las primeras capas de hojas, el tronco y las puntas.
Una vez que hemos dejado al descubierto el corazón de la verdura, echaremos por encima unas gotitas de limón para que no se ennegrezcan y tengan un aspecto más verde y fresco.
Colocamos una olla con agua y sal al fuego, le echamos un poquito de aceite, añadimos los ajos previamente machacados y las alcachofas, cortadas en mitades o en cuartos, dependiendo del tamaño de los corazones pelados.
Cuando estén listas, sacamos nuestras ligeras alcachofas, las escurrimos y las servimos. Podemos disfrutarlas tal cual o espolvoreando un poco de perejil fresco picado y dando un toque de pimienta molida.
Foto orientativa: Silverman68
A ver quién se resiste a este sencillo salteado de alcachofas con taquitos de jamón curado, la receta que desató en mí la pasión por esta rica verdura.
Haz estas deliciosas alcachofas en salsa de vino blanco, con cebolla, ajo y un toque de harina para darle el espesor deseado, y sorpréndete con su sabor.
Como entrante o acompañamiento, este rico plato de alcachofas rellenas de verduras es un plato rico y saludable para todas las edades.
Desde Roma nos llega una de sus recetas más importantes, las alcachofas a la romana. Se prepara en todas las casas, gusta a todos y encima son light.
Descarga las mejores recetas de Pollo
Recetas con pollo fáciles para todos los gustos y para cualquier ocasión. ¡Deliciosas!
Arroces
Bebidas
Carnes
Dulces
Ensaladas
Frutos secos
Guarniciones
Huevos
Legumbres y cereales
Mariscos
Masas
Panes
Pasta
Patatas
Pescado
Pizzas
Quesos
Salsas
Setas
Sopas y cremas
Verduras
