Receta de Bocadillos calientes

Pelamos y machacamos en el mortero el diente de ajo, y lo mezclamos con la mantequilla, que habremos tenido a temperatura ambiente unos 30 minutos para que esté blandita.

Abrimos el pan por la mitad, y untamos cada una de las mitades con la mantequilla con sabor a ajo que hemos preparado. Reservamos.

Lavamos los tomates y los cortamos en rodajas. Reservamos.

Cortamos también el queso en lonchas gruesas (a no ser que ya esté loncheado) y lo reservamos también.

Montamos el bocadillo colocando sobre la mitad inferior del pan las rodajas de salami. Sobre ellas, repartimos las rodajas de tomate y, para terminar, colocamos el queso encima de todo ello.

Espolvoreamos el interior del bocadillo con orégano y lo metemos en el horno, caliente a 180ºC, durante unos 5 minutos, de esta forma el queso se fundirá, el relleno del bocadillo se calentará y los sabores se mezclarán para que quede más rico.

Pasados los 5 minutos, sacamos el bocadillo del horno, lo cortamos en tantas partes como queramos y lo comemos en el momento, pues este bocadillo se come bien caliente y crujiente.

Foto orientativa: Andrzej Szymański

Usa el pan que más te guste para hacer estos bocadillos. Las chapatas y las baguettes suelen ser perfectos para ello, pero puede que te guste usar una viena o directamente dos buenas rebanadas de pan gallego o de pueblo.

Si te gusta que el queso tenga más sabor que la mozzarella, no dudes usar algún otro queso que funda bien, tipo parmesano, havarti o emmental... Usa el que más te guste o el que tengas en casa.

Si no quieres que tenga tanto sabor a ajo, puedes pelarlo, abrirlo por la mitad y frotar con él el pan por dentro. Luego unta la mantequilla o riega con aceite, como prefieras, igual que lo harías con la opción que he explicado en la preparación.