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- Receta de caracoles con crema de champiñones
Nadie se podrá resistirse a probar este exquisito plato de caracoles acompañados con una suave crema de champiñones. ¿A qué esperas para probarlos?
Antes de empezar con la elaboración de los caracoles con crema de champiñones, tenemos que desbabar los caracoles, dejándolos una hora antes en agua, con un sal y vinagre. Cambia el agua un par de veces. Después, pondremos los moluscos a cocer, en agua hirviendo, con una pizca de sal y una hoja de laurel.
Mientras los caracoles se cuecen, vamos a lavar muy bien los champiñones, para eliminar resto de arena que pudieran contener. Pelamos y cortamos en trozos pequeños la cebolla, para echarla en una sartén, con aceite caliente y pocharla.
Junto a la cebolla, echaremos los champiñones ya lavados y cortados en láminas. Mezclamos bien, y añadimos los tacos de jamón. Dejamos cocinar todo junto unos 10 minutos, aproximadamente. Bajamos la intensidad del fuego, y agregamos la nata líquida para cocinar.
Pasados 5 minutos, tenemos que bajar la potencia del fuego al mínimo para preparar la crema de champiñones. Añadimos una pizca de harina, según el grado de espesor que queramos obtener. Añadimos la leche, y removemos continuamente para disolver bien la harina y no queden grumos en nuestros caracoles con crema de champiñones.
Ahora si, agregamos los caracoles a la sartén, junto a la crema de champiñones. Sazonamos al gusto y dejamos cocer durante 10 minutos más. Espolvoreamos un poco de perejil picado sobre los caracoles con crema de champiñones, listo para servir.
Foto orientativa: jlastras
Dos recetas en una sola; con arroz y nata, o con vino y quesitos. Elijas la que elijas tendrás una crema de champiñones espectacular.
Entre las cremas, una de las reinas: un exquisito y reconfortante guiso con cebolla, ajo, pan tostado, caldo de pollo, champiñones y pimentón.
Esta crema de champiñones es una deliciosa receta con la que comenzar una comida o cena, y además no te llevará mucho tiempo prepararla. ¡Pruébala!
Suave y sabrosa crema con champiñones y nata. Un primer plato que, además de ser delicioso, resultará perfecto para hacernos entrar en calor en invierno.