Receta de Chuletas en salsa de cereza

La noche antes a la preparación de las chuletas en salsa de cereza, lo que haremos será echar la carne sazonada en un recipiente amplio, junto con la cebolla y el puerro partidos en trozos grandes, los ajos pelados, el pimentón, el vino, el laurel, el tomillo, unos granos de pimienta, y el clavo. Tapamos con papel film y lo dejamos en el frigorífico hasta el día siguiente.

En el momento de preparar las chuletas en salsa de cereza, lo que tendremos que hacer es rescatar la carne de la fuente. Ponemos una sartén al fuego con un chorro generoso de aceite y freímos el cordero hasta que se ponga ligeramente dorado. Cuando esté listo sacamos las chuletas y reservamos. En el mismo aceite pochamos la cebolla, el puerro y el ajo que teníamos en el recipiente (en este momento podríamos incluirle algunas cerezas frescas si las tuviéramos).

Cuando comience a reblandecer, incorporamos una cuchada de harina y dejamos tostar ligeramente. Ahora vertemos el caldo del adobo, junto con las hierbas y las especias, y, cuando rompa a hervir volvemos a introducir la carne (si nos quedara pequeña la sartén, pasamos todo a una cazuela). Dejamos cocer a fuego lento hasta que la carne esté tierna.

Cuando las chuletas estén en su punto, las volvemos a sacar, raspamos el fondo de la sartén o cazuela, retiramos las hierbas, la pimienta, el laurel, y el clavo, y añadimos la mermelada (podríamos utilizar también mermelada de frambuesas, fresas, etc). Damos unas vueltas y trituramos.

Para terminar el plato de chuletas en salsa de cereza, lo único que nos queda por hacer es, volver a meter la carne en la sartén, dejar cocer con la salsa durante otros 5 minutos, echarle por encima poco de perejil picadito... y ¡listo!

Foto orientativa: thebittenword.com