Receta de Confitura de albaricoque

Prepararemos una confitura de albaricoque para chuparse los dedos y empezaremos por lavar la fruta, secarla con papel de cocina y cortar cada pieza por la mitad, para retira a continuación cada semilla.

Pondremos los albaricoques deshuesados en la trituradora y los convertiremos en un puré, con el grosor que más nos guste para la confitura de albaricoques.

Lavamos las hojas de melisa, les escurrimos el agua y las picamos muy finita. Echamos la picadura en medio vaso de puré de albaricoques, al que también añadiremos el agar, un chorreón de limón y el jarabe de arce. Removemos y dejamos reposar.

Pondremos a hervir el resto de albaricoques triturados y, cuando rompa el primer hervor, añadimos la mezcla del vaso. Removemos y dejamos que hierva un par de minutos.

Retiramos y repartimos la confitura de albaricoque en varios tarros, lavados antes con agua caliente. Cerramos aún calientes.

Foto orientativa: La.Catholique

En alguna ocasión he usado un par de cucharaditas para acompañar mis platos de carne a la plancha (sobre todo con filetes de pollo a la plancha, que suelen ser bastante sosainas ) o asada como si fuese una salsa dulce y el resultado ¡fue genial!