Receta de Crema chantilly

Unos 20 minutos antes de ponernos a hacer la crema chantilly, pondremos la nata líquida y el bol (o el recipiente en el que vayamos a montarla) en la nevera para que en el momento de utilizarlo, esté todo bien frío.

Al ponernos a montar la nata, vertemos la cantidad indicada en el bol y añadimos el azúcar glas. Mezclamos muy bien con un tenedor o unas varillas manuales hasta conseguir que el azúcar se diluya por completo.

A continuación, agregamos la esencia de vainilla, sin excederse en la cantidad, si queremos dar un punto de aroma y sabor a la crema chantilly (si deseamos dar otro sabor distinto, podemos sustituir la esencia cualquier otra cosa: unas cucharadas de café, anís, agua de azahar, etc.) y removemos para que se integre.

Cambiamos las varillas de mano por una batidora de varillas eléctricas y batimos a velocidad media-alta hasta que la nata tome cuerpo y se monte. El grado de firmeza del chantilly puede ser mayor o menor, pero hay que tener mucho cuidado para evitar (por un exceso de batido) que la nata se convierta en mantequilla.

Una vez hecha la crema chantilly, si no se va a usar en el momento (aunque yo te recomiendo que la elabores justo en el momento en el que la vayas a utilizar), conviene guardarla en el frigorífico.

Preparamos los dos únicos ingredientes de la crema chantilly: la nata líquida y el edulcorante.

Para hacer la crema, necesitamos unas varillas eléctricas, aunque también podríamos batir la nata con varillas a mano, pero es muy costoso. Para hacerla, mezclamos la nata con el azúcar glass en un bol grande, y removemos para disolverla.

Luego, metemos las varillas eléctricas y batimos a una velocidad media. Hay que tener paciencia. Cuando la nata empiece a montarse, moveremos las varillas suavemente hacia los laterales, para montar toda la nata y darle su punto idóneo a la crema chantilly.

Una vez hecha, puedes usar la crema chantilly directamente para cubrir o rellenar tartas y pasteles, para decorarlos con una manga pastelera, etc.

Hay quienes le dan un toque de sabor a la crema con unas gotas de vainilla, agua de azahar u otros sabores. Es una opción, pero en mi opinión, la clásica crema chantilly no lleva más que nata y azúcar.

Para hacer la crema chantilly casera, vamos a necesitar unas varillas eléctricas. También se puede hacer batiendo a mano, pero nos resultaría mucho más costoso, y perderíamos más tiempo.

En bol frío y con la nata (crema de leche) también bien fría, vamos a mezclar la nata con el azúcar, e inmediatamente después vamos a empezar a batir a velocidad media alta. Para que no nos salte la nata mientras hacemos el chantilly, podemos cubrir el bol con papel film transparente, y dejar el hueco justo para meter el brazo de la batidora eléctrica.

Hay que batir durante entre 6 y 8 minutos, aunque depende del tipo de nata y de las condiciones ambientales. El chantilly estará hecho cuando se pueda untar con un dedo y éste no se caiga. Como veis, el chantilly no requiere cocción alguna, y se debe emplear justo después de elaborarlo.

Foto orientativa: Cocoinzenl

Se puede (incluso se debe, diría yo) modificar la cantidad de azúcar de la receta para que la crema chantilly quede todo lo dulce que uno quiera. Incluso los diabéticos o quienes estén a dieta pueden plantearse sustituir el azúcar por la cantidad proporcional de stevia, un edulcorante natural que aporta 0 azúcares y 0 calorías.