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- Receta de croquetas de bacalao
Las croquetas de tu madre y de tu abuela, en este caso a base de patata, bacalao y piñones. Tan ricas como sanas y nutritivas.
Pelamos las patatas y las cortamos en daditos para cocerlas posteriormente en una olla con sal, y facilitar así que éstas se hagan antes y mejor. Antes de echarlas al agua, las lavaremos, y las dejaremos en el agua durante unos 15 minutos. En los cinco últimos minutos, añadiremos a la cocción el bacalao.
Pasados los 15 minutos, sacamos de la olla las patatas y el bacalao (éste último lo desmigajaremos antes de echarlo), y lo echamos todo en un bol, al que añadiremos los dos dientes de ajo picados en trocitos lo más finos que podamos, varias hojas de perejil, también muy picaditas, las yemas de los dos huevos (las claras las reservamos para luego), y los piñones enteros. Con todo eso, mezclamos bien hasta conseguir una masa.
Por otro lado, batimos las dos claras de huevo, y con la ayuda de dos cucharas (o con las manos), hacemos la forma de las croquetas, las pasamos por la clara, luego por pan rallado, y las vamos reservando.
Una vez que tengamos todas las croquetas empanadas. Las meteremos en la sartén con aceite ya caliente, y las freiremos.
Fantásticas y deliciosas croquetas de bacalao y huevo cocido. Un segundo plato, aperitivo o tapa, que encantará tanto a niños como a mayores.
Para aquellos pequeños, y no tan pequeños, a los que no les gusta comer pescado, pero devoran las croquetas.
Nadie podrá resistirse a estas croquetas caseras de bacalao. Y es que, tanto su extraordinario sabor como su crujiente textura, no pasarán desapercibidos.
Con carne del cocido y con mucho mimo y paciencia, haremos estas ricas croquetas al estilo de nuestras madres y abuelas. Para congelar o comer al momento.