Una solución ideal y refrescante para un primer plato, o como acompañamiento, será esta deliciosa ensalada de acelgas con judías blancas y queso rallado.
Hacer esta ensalada de acelgas es algo muy sencillo y rápido, y resultará ideal para preparar en los días de verano.
Comenzamos la ensalada de acelgas, lavando muy bien las hojas de acelga, para quitar todos los restos de tierra que pudieran traer. Después, volcamos en un escurridor las alubias y las lavamos bien. Por otro lado, cortamos la cebolla en juliana. Ahora, ponemos a cocer las acelgas en agua y sal, durante 5 minutos (también podríamos usarlas sin cocer previamente). Cuando estén listas las escurrimos, dejamos que expulsen toda el agua, y esperamos que se enfríen.
Ahora, cogemos la ensaladera en la que vamos a servir la ensalada de acelgas, y echamos todos los ingredientes, es decir, la verdura, las alubias, la cebolla, un chorro generoso de aceite y un chorrito de vinagre. Removemos bien, y lista.
Foto orientativa: Stacy Spensley
Muchos son los que evitan comer verdura, pero si las acompañas con piñones, ajos, jamón serrano y huevo, el sabor es tan delicioso que cambiarás de opinión.
Las acelgas rehogadas constituyen una de las combinaciones más deliciosas de los rehogados bajos en calorías. Ideal por su sencillez y valor nutricional.
El garbanzo es uno de los mejores aliados de las acelgas, pero es bueno saber cómo hacerlo para que sea una comida más ligera y no una bomba calórica.
Emparedados de pencas de acelgas rellenas de jamón york y queso, y fritas en aceite de oliva. Una receta de crisis con vitaminas y sabor suave.
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