Ni os imagináis el sabor tan original que le presta el zumo de naranja a la bechamel de estas espinacas a la crema. Un truqui sencillo que cambia el plato.
Lavamos y escurrimos las espinacas y las colocamos en un recipiente apto para el microondas, lo tapamos con film transparente y lo metemos en el micro para que se cuezan durante ocho minutos.
Mientras, en una cacerolita vamos a calentar la bechamel, a la que previamente hemos agregado el zumo de la naranja recién exprimida.
Añadimos las espinacas cocidas y escurrida a la bechamel de naranja, mezclamos y dejamos a fuego suave durante un par de minutos más.
Ponemos una sartén al fuego y echamos lo piñones y los orejones picados, para que se asen. Los agregamos a las espinacas con bechamel de naranja y removemos muy bien.
Salpimentamos las espinacas con bechamel de naranja según nuestro gusto y damos un toquecito de nuez moscada. Servimos muy caliente.
Foto orientativa: Luis Miguel Cisneros
Cremosas espinacas rehogadas con ajito y gambas, cubiertas por una suave salsa bechamel y gratinadas en el horno. Un plato sencillo ¡y delicioso!
Ricas espinacas mezcladas con una salsa bechamel y queso fundido, que aportan un sabor espléndido y una textura jugosa que te va a encantar.
Suaves espinacas con una cremosa salsa bechamel hecha sobre un rico sofrito de cebolla y ajo. Todo ello al horno y gratinado con queso. ¡Espectacular!
Os explico minuciosamente cómo hacer salsa bechamel especial para la elaboración de croquetas caseras que también vale para lasaña, canelones o gratinados.
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