La mezcla de fresas naturales, requesón, mermelada y nata montada da como resultado un excelente postre con una presentación muy adecuada.
Echamos el requesón en el vaso de la batidora y añadimos el azúcar. Lavamos las fresas, les quitamos el rabito y reservamos cuatro piezas para adornar las fresas con crema de requesón.
El resto de fresas lavadas lo ponemos también el vaso de la batidora, una vez que lo hayamos troceado. Incorporamos además la mermelada a las fresas con crema de requesón.
Batimos todos los ingredientes, hasta que obtengamos un puré suave y perfectamente integrado que colocaremos en un cuenco.
Ahora toca ir añadiendo la nata montada, con mucho cuidado, al batido. Lo haremos con movimientos envolventes, para que no se baje la nata montada y, a continuación, metemos en el congelador durante media hora.
Transcurrido ese tiempo, removemos de nuevo las fresas con crema de requesón y la repartimos entre cuatro copas. Finalmente adornamos cada una de ellas con una fresa natural.
Foto orientativa: Bob B. Brown
Sencillas, refrescantes y nutritivas, las fresas con crema se convierten en un delicioso postre familiar para el verano, perfectas para mayores y pequeños.
Una base de masa casera rellena de crema pastelera también casera, y recubierta de dulces y exquisitas fresas. ¡La tarta más deseada!
La fruta fresca de siempre, pero con un toque diferente. Un gran placer al saborearla.
Este requesón revuelto a la mexicana es una deliciosa combinación de sabores y texturas, baja en calorías perfecta degustar como relleno de tus tacos.
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