Los guisantes frescos con morcilla son plato de legumbres bien acompañado que logra el equilibrio entre la buena alimentación, el sabor y el placer.
Para hacer estos guisantes con morcilla y tocino, yo os propongo cocinar con brasas para darle un toque ahumado al plato, pero si no es posible, haremos el último paso a la sartén.
Para empezar, coceremos los guisantes frescos durante 3 ó 4 minutos en agua con sal. Cuando estén cocidos, los escurriremos bien y los reservaremos. Mientras iremos cortando el tocino y la morcilla en daditos muy pequeños.
El último paso de la receta de los guisantes con morcilla consistiría en mezclar los guisantes con los dados de morcilla y tocino en un colador metálico, y removerlos sobre una brasa hasta que el tocino empezase a chispotear. Pero si no tenéis la posibilidad de ahumar los guisantes, podéis darle un golpe de sartén a todos los ingredientes, hasta que la grasa empiece a manchar la sartén.
Foto y fuente: el Cocinero Fiel
Deliciosa morcilla con pimientos de Padrón. Un aperitivo que, en cualquier momento, nos puede sorprender con el picor de alguno de los pimientos.
Como entrante o aperitivo, la morcilla con calabaza será una buena candidata, su mezcla de sabores lo convierten en un plato único y exquisito al paladar.
Si buscas una tapa o aperitivo que se pueda consumir como entrante en cualquier evento, no necesitas buscar más, aquí tienes un exquisito plato de morcilla.
Preparar un delicioso plato de morcilla con huevos nos llevará apenas unos minutos, con lo que se convierte en un plato ideal en cualquier momento del día.
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