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- Receta de lasaña de longaniza y repollo
Una lasaña tan diferente, como sabrosa, sustanciosa y riquísima, a base de verduras, carne picada, bechamel, repollo, queso mozzarella, etc. ¡Uuuummm!
Esta original lasaña de longaniza y repollo se hace por partes. Empezamos por el relleno de la lasaña:
- Picar una cebolla, dos zanahorias y las ramas de apio, y pocharlas salpimentadas en dos cucharadas de aceite de oliva, a fuego medio-bajo en una sartén.
- A los 5 minutos, añadir los 2 dientes de ajo picados.
- Cuando todo esté bien sofrito, echar una cucharada de tomate concentrado, remover; añadir una copa de vino añejo (o tinto, o blanco), y dejar reducir.
- Luego, echar la carne fresca de la longaniza, o la carne picada, mezclar, y dejar que todo se vaya tomando.
Otro de los ingredientes del relleno de la lasaña de longaniza y repollo, el repollo, lo picaremos y lo coceremos aparte. Cocido, lo reservaremos, lo salpimentaremos, y lo mezclaremos con la mozzarella cortada en taquitos pequeños.
Por otro lado, vamos a poner a cocer las láminas de pasta (tiene que haber suficiente para 3 capas del tamaño de la bandeja que vayamos a usar). Una vez cocida las pasta de la lasaña, las reservamos sobre un paño limpio, para que no que peguen.
Y por último, haremos una bechamel para la lasaña de longaniza y repollo:
- Pondremos a calentar el aceite de oliva.
- Cuando esté muy caliete, echaremos la harina y la disolveremos, e iremos echando la leche en 3 tandas.
- Al final, pasaremos las varillas para que la bechamel quede sin grumos, y añadiremos nuez moscada, pimienta y sal.
Para componer la lasaña de longaniza y repollo, ponemos una capa con la mita de la bechamel en el fondo de la fuente, luego una de pasta, encima una de sofrito, otra de pasta, otra con el repollo y el queso, una más de pasta, la bechamel sobrante, queso parmesano rallado, ¡y al horno 20 minutos a 180 ºC!
Foto y fuente: el Cocinero Fiel
Para hacer la lasaña de longaniza y repollo, si no tenemos longaniza, o no sabemos si quiera dónde encontrarla, podemos sustituirla por la misma cantidad de carne picada de cerdo, de pollo, de pavo o de ternera.
Si queréis, una vez hecha, pero antes de ser horneada, podéis guardar la lasaña de longaniza y repollo en el congelador, para consumirla en un plazo de unos dos meses.
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