Deliciosa carne de lomo de cerdo con una salsa de tomate casera y el toque perfecto de los champiñones y el vino tinto. Un guiso sencillo y lleno de sabor.
Lavamos las verduras que tengan que lavarse, y pelamos el resto. Picamos todas las verduras en trocitos pequeños y las reservamos por separado.
Ponemos una cazuela al fuego con un chorrito de aceite y las hojas de laurel.
Vamos añadiendo a la cazuelas las verduras, empezando por las más duras y terminando por las más tiernas.
Mientras las verduras se van sofriendo poco a poco, cortamos el lomo en cubos del tamaño de un bocado (unos 2 centímetros por cada lado).
Cuando las verduras estén listas, añadimos la carne. Sazonamos.
Cuando el lomo empiece a cambiar de color, regamos con el vino y dejamos que cueza 3-4 minutos, para que el alcohol se evapore.
Añadimos el tomate triturado y el tomillo, y dejamos que todo cueza entre 20 y 30 minutos a fuego suave.
Limpiamos las setas o los champiñones, y los cortamos en láminas.
Probamos la salsa del lomo, rectificamos de sal si fuera necesario y agregamos azúcar si lo necesitamos. Una vez que el tomate esté en su punto, añadimos los champiñones a la cazuela y dejamos cocer todo junto 10 minutos más.
Listo, un guiso sencillo, lleno de sabor y de nutrientes.
Foto orientativa: Danny Nicholson
El aźucar la añadiremos al guiso, si vemos que la salsa de tomate está un poco ácida. Si al probar el tomate este no está ácido, no la añadas y evitarás calorías vacías e hidratos de carbono no necesarios.
Si el alcohol no se evapora, el guiso sabrá a alcohol, y el sabor no será agradable. Por ello, aunque dicen que con 2-3 minutos es suficiente para el vino, yo prefiero dejarlo siempre 4 minutos para asegurarme.
Mientras se cuece la carne con el tomate, debemos remover de vez en cuando para asegurarnos que no se pega. Pero ten cuidado, pues el tomate suele saltar mucho cuando se mueve, por lo que te recomiendo que antes de mover la salsa, retires la cazuela ligeramente del fuego.
Si no tienes champiñones, puedes añadir setas de las que más te guste. Uses lo que uses, seguro que el lomo quedará delicioso.
Con su salsa de uvas y su relleno de frutos secos y jamón serrano, este plato de carne es perfecto para todas las celebraciones, como las navideñas.
Lomo de cerdo con frutos secos, adobado en una mezcla de pimientos, guindas, ajo, cebolla y clavo. Toda una explosión de sabor que merece la pena probar.
Gracias al mechado, o sea a introducir dentro de la carne de cerdo un poco de bacon y jamón, se consigue una carne jugosa y llena de sabor... ¡A por él!
Delicioso plato de carne mechada y macerada en una mezcla de chile, cebolla, especias, etc. Impecable de sabor y aspecto para Navidad y Acción de Gracias.
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