Receta de Mermelada de higos

Antes de preparar la mermela de higos, vamos a escardarlos durante un minuto, metiéndolos en agua hirviendo. Pasado el tiempo, los retiramos y los dejamos enfriar. De esta forma los higos se pelarán más fácilmente y la cantidad de carne del higo que se irá con la piel, es mínima.

Una vez que tenemos toda la fruta pelada, continuamos con la preparación de la mermelada de higos echando el azúcar en una cazuela al fuego. Vamos viendo como se derrite el azúcar poco a poco hasta que esté completamente derretida, pero sin hacerse caramelo.

Una vez que el azúcar está lista, echamos en la cazuela los higos y lo dejamos cocer el tiempo suficiente para que los higos suelten el agua y luego se evapore y se quede una mermelada espesita y gelatinosa.

Para terminar, echamos la mermelada de higos en un tarro de cristal, lo tapamos y lo metemos en el frigorífico para que se enfríe. Aunque si quieres asegurarte mermelada durante meses, hazles el vacío como se ve en este vídeo de tomates en conservas.

Foto y fuente: el Cocinero Fiel

El azúcar gelificante es un azúcar normal a la que se le añade pectina para que los alimentos a la que se añada se espesen. Si no la tienes, puedes añadir a esta mermelada el mismo peso de la fruta de azúcar y un sobre de gelatina neutra.

Ojo: Si usas el azúcar gelificante, mira bien la proporción de azúcar por fruta, ya que las hay de 1:1, de 2:1 e incluso de 3:1, o sea, en nuestro caso habría que añadir 500 gr, 250 gr y 167 gr. respectivamente, para los 500 gr. de higos.