Con tan solo el pollo, pimienta, y sal, tendremos suficiente para hacer estas saludables y fantásticas pechugas al vapor, con cero de grasa.
Estas pechugas al vapor, no necesitarán nada de aceite, por lo que resulta un plato que, además de delicioso, será también muy saludable.
Las pechugas al vapor son realmente sencillas de preparar, por lo que no tendremos que complicarnos en la cocina. Para empezar, cogemos las pechugas, les hacemos un cortes que lleguen aproximadamente hasta el centro, pero sin que se lleguen a romper. Después, añadimos sal y pimienta, y las envolvemos en papel film.
Ahora, ponemos una cazuela con agua al fuego, y esperamos hasta que rompa a hervir. En ese momento, apoyamos un escurridor sobre la cazuela (el agua no debe llegar a entrar por los agujeritos. Ponemos sobre el escurridor la carne, y colocamos una tapadera. Mantenemos esto así, hasta que veamos que la carne ha cogido color por todos lados, dándole vueltas al pollo, de vez en cuando.
Después, las pechugas al vapor estarán listas.
Foto orientativa: jlastras
El pollo en salsa de champiñones, con su nata, su cebolla y sus ajitos, es una de las formas más ricas y jugosas de preparar las pechugas de pollo.
Jugosos filetes de pechuga de pollo en salsa de tomate y cebolla. Una receta fácil, rápida y sabrosa. ¡Para chuparse los dedos!
Con muy pocos ingredientes, en menos tiempo del que imaginas, puedes preparar unas deliciosas pechugas rellenas bajas en calorías y con mucho sabor.
Con esta receta conseguirás que las pechugas de pollo te queden jugosas y con un rico sabor agridulce. Los niños las devoran, y los no tan niños, también.
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