- Inicio
- Recetas de salsas
- Receta de salsa de ostras
¿No encontrabas la receta de la salsa de ostras casera? Aquí la tienes, increíblemente sabrosa para aderezar recetas de pollo, pescado, marisco, etc.
La famosa salsa de ostras se suele comprar, pero si no la encuentras, también puedes hacer tu propia salsa de ostras casera, o salsa de ostión siguiendo esta receta.
Empieza picando bien finitos el ajo, la cebolla y el jengibre, y cuanto lo tengas, añádelo a una cazuela donde previamente hayas calentado dos cucharadas de aceite de oliva, y sofríe los vegetales a fuego medio, removiendo sin parar.
Cuando el jengibre, el ajo y la cebolla vayan estando doraditos, vamos a añadir las ostras junto con su jugo y vamos a seguir rehogando.
Para darle sabor y color a la salsa de ostras, vamos a añadir la salsa de soja y, bajando ligeramente el fuego, vamos a seguir rehogando y removiendo sin parar. Para darle un poco de consistencia y cremosidad a la salsa, añadiremos también la maizena, y removeremos hasta que esté bien integrada.
Una vez hecho esto, volcaremos el contenido de la cazuela en el vaso de la licuadora, y licuaremos hasta tener una salsa de ostras fina y sin grumos. Es hora de rectificar de espesor añadiendo más agua si se desea, o de dejarla como está.
La salsa de ostiones debemos guardarla en el refrigerador en un recipiente esterilizado, y usarla en un plazo de unos tres días.
Foto y fuente: Cocinemosjuntos.com
Si no encontráis piloncillo, podéis sustituirlo por dos cucharadas de azúcar moreno. El objetivo es darle a la salsa de ostras ese contrapunto dulce y salado característico.
Como indica el autor de este vídeo en el que nos hemos inspirado para relatar la receta de la salsa de ostión, el color de esta salsa casera no es oscuro, como el de la salsa de ostras comercial. Eso se conseguiría añadiendo algún tipo de colorante, pero no es necesario:
Las ostras sin concha las vais a encontrar envasadas en frascos en muchos supermercados. Si no las encontráis, como alternativa, también se podría hacer la salsa de ostras con una cantidad equivalente de berberechos o de navajuelas, por ejemplo. No es lo mismo, ni se podría llamar salsa de ostión al no llevar ostras, pero es una solución alternativa.
Ternera, champiñones, cebolla, brócoli y salsa de ostras son los ingredientes principales de este jugoso y sabroso plato de comida china.
Un riquísimo plato de ostras cocidas en una cazuela con una salsa hecha con el caldo de la cocción de las ostras, guisantes, calabacines, guindilla, mostaza y zumo de limón.
No necesitas ir a un buen restaurante para disfrutar de unas exquisitas ostras al limón. Con esta sencilla receta y verás que fáciles son de preparar.
Un maravilloso regalo en boca, las ostras calientes al azafrán, nos permiten degustar este marisco con una crema deliciosa y tentadora.