Una exquisita sopa de frutas, no apta para menores, por su contenido en alcohol. Ideal para tomar como entrante para acompañar cualquier menú de adulto.
Comenzaremos la preparación de la sopa de fresas y kiwi, preparando la fruta. Pelamos los kiwis, y los cortamos en trozos. Lavamos las fresas, las quitamos el rabito y las partimos en dos. Pelamos el mango y lo cortamos en trozos no muy grandes. Abrimos un limón en dos mitades, y exprimimos el zumo sólo de una mitad.
Una vez que tengamos las frutas listas, las echaremos en el vaso de la batidora eléctrica. Añadimos el azúcar, el agua, el vino y el zumo de medio limón. Trituramos todo, hasta obtener una textura suave y sin grumos.
Para que la sopa de fresas y kiwi quede con una textura mucho más suave, vamos a colar el caldo obtenido. De esta forma eliminaremos grumos y quitaremos las pepitas de las fresas.
De nuevo, colocamos la sopa de frutas en la vaso de la batidora y agregamos una cucharadita de miel, para potenciar el sabor de la sopa. Mezclamos bien y metemos la sopa de fresas y kiwi en el frigorífico, para que a la hora de servir esté bien fría.
Foto orientativa: jlastras
Utilizando tan solo unas fresas, un kiwi y helado de vainilla, haremos en un momento y sin complicaciones, este delicioso postre de fresas con kiwi.
Riquísima y original sopa de fresas, un postre o cóctel que combina a la perfección las fresas naturales y el sabor de un jarabe de fresas casero.
Un postre diferente.
Si compraste demasiadas fresas y ahora no sabes qué hacer con tantas... aquí tienes una buena idea para prepararlas. Realmente te gustará.
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