Receta de Tarta de manzana con masa casera

Mezclamos en un bol la harina con los dos huevos, el azúcar y la mantequilla. Si tenemos una buena varilla en casa (eléctrica o manual), éste es el momento de utilizarla; si no, un tenedor nos servirá para mezclarlo todo.

Cuando se hayan mezclado todos los ingredientes de la masa casera de nuestra tarta de manzana, pasamos a amasarla un poco con las manos, pero tampoco demasiado, ya que no debe estar muy trabajada, sólo lo justo para que los ingredientes se integren bien y tengamos una mezcla homogénea y uniforme.

Una vez lista, la reservamos mientras preparamos el relleno de esta tarta de manzana con masa casera.

Ponemos en un cazo el agua con el azúcar. Mezclamos, llevamos al fuego y dejamos que se haga un almíbar suave.

Entre tanto, descorazonamos las manzanas y las pelamos. Las cortamos en dados.

Ahora, con un rodillo, estiramos la masa lo suficiente como para que una vez dividida en dos partes, tengamos dos porciones del tamaño necesario para cubrir con una de ellas la base del molde donde haremos la tarta, y con la otra cubrir la superficie de la tarta de manzana con masa casera una vez rellena.

Así pues, cubrimos el fondo de un molde con la masa casera, ajustamos bien al fondo con cuidado de que no se rompa, y agregamos dentro los dados de manzana.

Añadimos por encima el almíbar y cubrimos la tarta de manzana con la masa casera restante.

Hacemos pequeños orificios con un tenedor o con un cuchillo en la superficie de la tarta para permitir que los vapores que se liberen durante la cocción de la tarta de manzana puedan salir al exterior y no rompan la masa.

Introducimos la tarta de manzana en el horno ya precalentado a 160ºC durante 40 minutos, y una vez finalizado el tiempo, la sacamos, la dejamos enfriar y la servimos.

Foto orientativa: Joebone

Podemos añadir un poco de canela sobre las manzanas y unos frutos secos machacados sobre la masa, pero es completamente opcional. De una forma u otra, la tarta de manzana quedará bien.

Conservaremos la tarta de manzana tapada durante dos o tres días a lo sumo en un ambiente fresco y seco.