Receta de Acelgas con garbanzos

Tendremos los garbanzos durante un mínimo de 12 horas en remojo, para que se hidraten y se cuezan correctamente en menos tiempo.

Una vez que ha pasado el tiempo de remojo mínimo, nos ponemos manos a la obra con la preparación del guiso en sí. Lavamos las acelgas, las escurrimos y las picamos en trozos ni muy pequeños ni muy grandes, más o menos del ancho y del largo de un dedo de la mano. No hay que obsesionarse en que queden todas igual, no es necesario.

Luego, escurrimos los garbanzos y los reservamos.

En la olla express echamos las acelgas (parecerán muchas, pero al cocer se quedan en nada) y los garbanzos. Cubrimos más o menos la mitad del guiso con agua (no es necesario cubrirlas enteras, pues las acelgas sueltan mucha agua durante la cocción), sazonamos y tapamos la olla.

Dejaremos que todo cueza unos 15 minutos, en olla súper rápida y contando el tiempo desde que empieza a salir el vapor de la olla.

A los 15 minutos, retiramos el fuego, esperamos a que deje de salir el vapor de la olla, y la abrimos. Reservamos.

Mientras los garbanzos y las acelgas se van cociendo, vamos a preparar los ingredientes para hacer el majado que le dará sabor al guiso. Para ello, en una sartén aparte echamos un chorro de aceite junto con los ajos enteros pelados.

Cuando el aceite coja temperatura, echamos en la sartén las rebanadas de pan, y dejamos que se doren junto con los ajos.

Una vez dorado todo, bajamos el fuego (o retiramos la sartén del mismo) y añadimos el pimentón. Rápidamente, para evitar que el pimentón se queme, le daremos vueltas al contenido de la sartén. Lo que queremos es que el pimentón coja un rico sabor a frito, pero no que se queme, por eso esta operación debe hacerse con el fuego a poca intensidad y rápidamente.

Añadimos por último el comino, y lo machacamos todo en un mortero, o sea, el ajo, el pan, el aceite, el pimentón y el comino.

Lo echamos todo en la olla, lo removemos, lo dejamos cocer unos 10 minutos para que todos los sabores se mezclen perfectamente, y listo. Ya sólo nos queda llevarlo a la mesa y disfrutarlo, pues está delicioso.

Foto orientativa: Ana Jaén

Si quieres, puedes freír unas cuantas rebanadas de pan más acompañar cada plato con una rebanada frita... Le dará un toque delicioso a las acelgas con garbanzos.