Receta de Alcachofas con jamón

Si vas a utilizar alcachofas frescas, el primer cometido será limpiar las alcachofas. Para ello, les debes cortar la parte superior y la inferior por el tallo y las partimos por la mitad (el tallo puede ser pelado y utilizado también, es muy rico).

Empezamos por cocer las alcachofas en un cazo con agua abundante, dos cucharadas de aceite, sal y una cucharada de zumo de limón. Unos 10 minutos después, cuando las alcachofas estén "al dente", se retiran de la cazuela y se reserva un poco del caldo de cocción (esta primera cocción de las alcachofas no tiene que ser completa ya que luego se van a cocer otros 10 minutos).

Segundo paso para hacer las alcachofas salteadas con jamón perfectas: pelamos y fileteamos los ajos y los freímos en una sartén con aceite, con mucho cuidado de que no se nos quemen. En cuanto empiecen a tomar color, los retiramos e incorporamos el jamón cortado en dados. Espolvoreamos una cucharada de harina, removemos, y dejamos que se tueste. Se riega con el caldo de cocción de las alcachofas y se remueve, procurando que quede una salsa fina.

Rociamos con el contenido de la sartén cada una de las alcachofas y ponemos nuestras alcachofas con jamón a fuego bajo durante unos 10 minutos. Se sirven muy calientes.

Foto orientativa: Silverman68

Aunque muchos hacen las alcachofas salteadas con jamón con los corazones de alcachofa de los que venden en frasco, yo no lo recomiendo ya que el sabor de las alcachofas en conserva no tiene nada que ver con el de las alcachofas frescas.

Los corazones de alcachofa congelados, en cambio, pueden ser una buena alternativa, al no verse alterado su sabor.

Las alcachofas son una de las verduras con más propiedades beneficiosas que conozco, pero también sé que no a todo el mundo le gusta ese sabor dulce que dejan de fondo. Si eres de esos, antes de descartarlas de tu dieta, te recomiendo que pruebes esta sencilla receta de alcachofas con jamón curado con su rica y fácil salsa de ajo, harina y caldo. Después me dices qué te parecen.