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- Receta de arroz a la cubana
Un plato completo, rico y fácil de hacer que lleva plátano frito, huevos fritos, arroz aromatizado con ajo y tomate frito. Un éxito entre los niños.
Primero freímos los dientes de ajo cortados en láminas en una cazuela con un poquito de aceite de oliva, hasta que estén doraditos.
A continuación, agregamos el arroz y lo sofreímos un poco removiendo bien para que no se pegue al fondo. El ajo le dará un aroma muy agradable al arroz a la cubana que, no obstante, pueden obviar aquellos a quienes no guste el ajo.
Por otra parte, ponemos agua a hervir en un cazo y cuando esté hirviendo lo añadimos al arroz con una pizca de sal y vamos removiendo y cociendo durante 15 ó 20 minutos. Depende del tipo de arroz que hayas elegido para hacer el arroz a la cubana. Pasado ese tiempo, apagamos el fuego y dejamos que se enfríe unos 5 minutos.
Toca el turno de los plátanos machos. Los pelamos, los cortamos a lo largo en dos mitades, los untamos en aceite y los freímos en una sartén hasta que estén dorados.
A continuación, freímos los huevos en una sartén pequeña con aceite y los sazonamos con una pizca de sal (podemos hacerlos fritos, a la americana, etc.).
Finalmente, para presentar el arroz ala cubana podemos hacerlo bien de forma individual (una ración de arroz, un huevo, y medio plátano macho por persona) o bien vertiendo el arroz en una fuente, cubriéndolo con el arroz con tomate frito, y colocando encima los huevos fritos y las tiras de plátano frito.
También se pueden añadir unas salchichas bien doraditas, pero es opcional.
Foto orientativa: fguillen
Sobre cómo hacer arroz a la cubana nos podemos encontrar decenas de recetas con versiones distintas, pero ésta se intenta asemejar a la receta original del arroz cubano con plátano frito.
Como con toda receta de arroz, a la hora de cocerlo conviene tener muy en cuenta el tipo de arroz usado. Para el arroz a la cubana, yo prefiero arroz de grano redondo.
Teniendo tiempo, siempre es mejor hacer el tomate frito casero en lugar de comprarlo ya hecho.
Aunque os recordará a vuestra infancia, esta receta sencilla que nunca falla, tiene un toque de distinción que te sorprenderá.
El ajo, el laurel, la cebolla, el aceite de oliva, y sobre todo, la forma de hacerlo, le dan a esta receta de arroz blanco un punto genuino de sabor único.
Arroz con pollo, una buena variedad de verduras, un toque de leche y azafrán. Un plato al estilo tradicional rico rico y sano sano.
Un divertido plato muy fácil de hacer, aunque lleva su tiempo. El arroz inflado podremos utilizarlo de mil maneras y comerlo sólo o aderezado.