Receta de Baklavas egipcias

A la hora de preparar unas deliciosas baklavas egipcias, lo primero de todo es elaborar el sirope. Para ello, ponemos 2 tazas de azúcar y 1 taza de agua en un cazo. Lo llevamos al fuego (a potencia media) y, sin dejar de remover, esperamos a que se deshaga el azúcar.

Cuando la mezcla no tenga grumos y haya adquirido una tonalidad amarillenta, el sirope para nuestras baklavas egipcias estará listo. Lo retiramos del fuego, agregamos 1 cucharada de zumo de limón, y lo reservamos en la nevera.

Ponemos a fundir la mantequilla, y la usamos para engrasar la bandeja que vayamos a utilizar. Colocamos la primera lámina de pasta filo, y la pincelamos con mantequilla. Colocamos otra lámina, y volvemos a pintarla. Repetimos, hasta tener 7 capas similares.

Machacamos las avellanas tostadas en un mortero, y las ponemos por encima de la pila de láminas de pasta filo que hemos montado. A continuación, lo cubrimos todo con las otras 7 láminas de pasta filo restantes, pincelándolas con mantequilla como hemos hecho con la base, y con una ración doble de mantequilla en la última lámina.

En la misma bandeja, cortamos las porciones para nuestras baklavas egipcias (suelen ser triangulares o cuadradas), y las horneamos a 180ºC., durante 25 minutos aproximadamente.

Cuando salgan del horno, ya doraditas, regamos nuestras baklavas egipcias con el sirope frío, y dejamos que se enfríen a temperatura ambiente, antes de degustarlas.

Foto orientativa: balise42