Receta de Carpaccio de calabacín

Empezamos por lavar y secar muy bien toda la verdura, poniendo especial atención en la eliminación de la tierra que pudiera tener el puerro. Una vez listas, pelamos el calabacín y con la ayuda de una mandolina o con un cuchillo bien afilado, lo laminamos fino.

Colocamos las rodajitas sobre una bandeja y reservamos.

Ahora picamos el puerro en daditos (sólo la parte blanca o si quieres, un poquito de la verde) y lo esparcimos sobre el calabacín a modo de lluvia.

Espolovoreamos la ralladura de la piel de la lima por encima de todo, salpimentamos y ahora, exprimimos la lima y regamos el carpaccio de calabacín con su zumo.

Damos el toque final al plato añadiendo un generoso chorro de aceite de oliva virgen extra y lo rematamos repartiendo las hojas de menta y unas cuantas lascas de queso parmesano. Listo, ya tenemos el carpaccio preparado para tomar, aunque yo te recomiendo que lo dejes al menos 15 minutos en la nevera (o fuera) tapado con papel de film para que los sabores se intensifiquen antes de llevarlos a la mesa.

Foto orientativa: Javier Lastras

Si quieres, en lugar de poner el zumo de lima por un lado, la sal, la pimienta, la ralladura de la lima y luego el aceite, puede hacer una vinagreta sencilla poniendo, por cada parte de zumo de lima, tres de aceite. Para eso, pondremos el zumo de lima, condimentaremos con sal y pimienta, añadiremos la ralladura de la lima y lo batiremos para que se mezcle todo bien. A continuación, y sin dejar de batir, iremos añadiendo el aceite en hilo para que vaya emulsionando y una vez listo, regamos el carpaccio, decoramos con la menta, añadimos el queso y listo.

Si no tienes lima la puedes sustituir por limón.