Las costillas dulces se preparan fácilmente en el horno y el resultado es delicioso. Fantástico para una comida informal o una fiesta entre amigos.
Sazonaremos adecuadamente el costillar de cerdo bien limpito. No hace falta despiezarlo, estará bien entero y saldrán unas costillas dulces exquisitas.
Ponemos el horno a precalentar a 200ºC, y dejamos que se caliente durante un cuarto de hora. Mientras, ponemos el costillar de cerdo en una bandeja de horno, suavemente engrasada.
Elegimos la miel que más nos guste, aunque yo siempre la hago con miel mil flores porque es la que más me gusta. Regamos las que van a ser nuestras costillas dulces con la miel, de manera generosa, y metemos en el horno precalentado.
Dejamos que las costillas se vayan cocinando al horno despacito. Tras una hora aproximadamente de horneado, las costillas deberían lucir un bonito color dorado y estar en su punto.
Sacamos y servimos el costillar entero sobre una fuente para presentación y acompañamos con unas patatas cocidas y espolvoreadas con un poco de pimienta molida.
Foto orientativa: jeffreyw
Un rico costillar al horno previamente macerado con ajo, limón, aceite de oliva y tomillo, y pintado con una fina capa de miel. ¿Alguien da más?
Lo mejor de esta receta de costillas de cerdo es que no agregamos ningun aporte calórico extra, por lo que obtenemos una carne limpia y exquisita.
La zanahoria es un ingrediente que combina a la perfección con las costillas de cerdo, por lo que obtendremos un plato con una guarnición perfecta.
Unas sabrosas costillas de cerdo asadas al horno y aderezadas con salsa barbacoa que nada tienen que envidiar a las elaboradas en los mejores restaurantes.
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