Receta de Galletas integrales light

Ponemos el horno a precalentar a 170ºC con calor arriba y abajo y comenzamos a preparar la masa de estas galletas integrales light.

Es tan fácil, que sólo tendremos que coger un bol amplio y añadir en él una cucharada de edulcorante, una pizca de sal y el resto de los ingredientes que te indico en la receta, es decir, la levadura, la harina, la ralladura y el zumo de naranja, el aceite y la zanahoria rallada.

Mezclamos bien hasta que los ingredientes empiecen a integrarse y a continuación, terminamos de formar una mezcla homogénea, amasando todo con las manos.

A continuación, en una superficie lisa ponemos un papel de hornear, encima la masa de las galletas integrales, cubrimos ésta con otro papel de hornear (así evitaremos que la masa se pegue al rodillo) y empezamos a pasar un rodillo por encima con el fin de estirar la masa hasta conseguir una lámina de un centímetro de espesor aproximadamente.

En ese momento, retiramos el papel superior y lo colocamos (con la parte que ha estado en contacto con la masa hacia arriba) en la bandeja de horno.

Ahora, con un cortapastas circular, damos forma a nuestras galletitas que iremos colocando (dejando unos centímetros de separación entre ellas) sobre la bandeja de horno que acabamos de forrar.

Cuando tengamos la bandeja llena, la metemos en el horno y dejamos que las galletas integrales light se horneen hasta que empiecen a tener un bonito color dorado. En ese momento retiramos del horno, pasamos a una rejilla para que se enfríen por completo y repetimos el proceso hasta terminar con la masa.

Foto orientativa: LearningLark

Tanto el número de galletas como el tiempo de horneado dependerá del grosor final que le hayas dado a cada pieza y del tamaño de su circunferencia. Si ésta es de unos 5cm. (más o menos) te pueden salir en torno a unas 25 galletas.

Además, el tiempo de horneado no sólo depende del tamaño de la galleta sino también del tipo de horno, por lo que te recomiendo que a partir de los 5 ó 7 minutos de horneado estés más pendiente de su evolución para que no se te quemen.

Si no tienes cortador de pastas, puedes tomar porciones de la masa con las manos y dar forma a las galletas directamente. Para eso, tan sólo tendrás que hacer una pelotita, ponerla en la bandeja y seguidamente, aplastarla con la palma de tu mano o con el culo de una cuchara hasta que tengan el grosor deseado.

Si las quieres más jugosas, deberás dejarlas un poquito más gruesas y si por el contrario te gustan más crujientes, más finas.