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- Receta de magro de cerdo al ajillo
Tierno y jugoso resulta este plato de magro de cerdo al ajillo, acompañado de unas patatas salteadas en mantequilla y perejil. Un manjar fácil y delicioso.
Empezamos lavando y pelando las patatas, para luego ponerlas a cocer en una cazuela con abundante agua hirviendo y sal. Una vez que estén listas (normalmente, con unos 10 minutos será suficiente, pues en este caso, además, no queremos que estén demasiado cocidas, pues tendremos que cortarlas en dados y no queremos que se nos desmiguen), las escurrimos y las cortamos en dados.
Mientras las patatas se cuecen, cortamos el magro de cerdo en tacos pequeños, los salpimentamos y reservamos.
Ahora, ponemos en el fuego una sartén amplia con un buen chorro de aceite de oliva y cuando comience a calentarse, echamos los ajos enteros, sin pelar y ligeramente aplastados con la hoja de un cuchillo.
Cuando los ajos empiecen a hacerse, echamos la carne que teníamos reservada y una vez que esté dorada, vertemos el vino blanco y la hoja de laurel, dejando el fuego alto para que el vino se reduzca.
En otra sartén echamos la mantequilla y un poco de perejil y llevamos al fuego. Cuando se haya derretido, agregamos las patatas (que ya tendremos cocidas, escurridas, peladas y cordadas en dados) y las removemos de vez en cuando a fuego medio unos minutos hasta que se doren.
Cuando el vino haya reducido, retiramos la sartén del fuego y colocamos en el plato el magro de cerdo al ajillo acompañado de las patatas. Servimos en la mesa sin dejar enfriar.
Foto orientativa: Demi
Sabroso magro de cerdo adobado que vamos a acompañar de unos deliciosos pimientos fritos. Un plato que destaca por su intenso e insuperable sabor.
Jugoso magro de cerdo envuelto en un delicioso pisto con tomate, cebolla, pimientos, y calabacín. Todo impregnado con un inconfundible toque de cúrcuma.
Tiernos dados de cerdo cocinados con vino, caldo y un rico sofrito de cebolla, ajo y pimiento. Acompañamos de un sabroso repollo al ajillo ¡y a comer!
Las costillas de cerdo al ajillo combinan un sabor estupendo con una textura excelente, y es que la carne se pone crujiente y jugosa al cocinarla así.