- Inicio
- Recetas de dulces
- Recetas de frutas
- Receta de mermelada sin azúcar
Cerezas, gelatina, zumo de limón, agua y un toque de edulcorante, son los ingredientes necesarios para hacer una deliciosa mermelada apta para diabéticos.
Lavamos las cerezas, les retiramos el rabito y les quitamos el hueso con paciencia.
Una vez deshuesadas, las troceamos en cuatro o cinco tajadas. Cuanto más finas, más se romperán en la cocción y menos trozos tendremos a la hora de untarla y comerla.
Echamos las cerezas en una cazuela, agregamos el agua (excepto un dedo que usaremos para disolver la gelatina) y el zumo de limón, y lo ponemos a cocer a fuego vivo unos 30 minutos.
Durante la cocción, iremos removiendo la mermelada sin parar, para que la fruta ni se pegue ni se queme, y veamos además la consistencia que va adquiriendo.
Si a los 30 minutos vemos que aún tiene mucho líquido, bajaremos el fuego y dejaremos la mermelada unos 20 minutos más. Hay que tener en cuenta que cuando la mermelada se enfríe, ganará en consistencia considerablemente.
En el poquito de agua que habíamos reservado, disolvemos la gelatina y, una vez fuera del fuego, la añadimos a la mermelada. Mezclamos bien.
Podemos triturar un poco la mermelada con la batidora, para darle un poco más de untuosidad, pero no mucho, pues no queremos que nos convierta en pudin, la mermelada tiene que tener trocitos.
Una vez que tenemos todo listo, es el momento de probar la mermelada y añadir edulcorante si lo vemos necesario, pues al no llevar azúcar, no lo mismo la mermelada no está lo suficientemente dulce.
Sólo nos queda echar la mermelada en los recipientes esterilizados, y hacer el vacío si queremos que nos dure mucho tiempo, cociendo los tarros cerrados en agua, unos 20 minutos.
Foto orientativa: Liliana Fuchs
Asegúrate con las indicaciones que se indican en el envase de la gelatina que utilices la forma de uso de la misma, pues si se usa mal, lo mismo no se consigue espesar la mermelada, que es lo que buscamos, pues al ser sin azúcar necesitamos algo para espesarla.
Lo mismo te digo con el edulcorante, no todos los edulcorantes se pueden añadir a la cocción, por eso lee bien el envase.
Si no quieres añadir el zumo de limón, puedes añadir como 1/4 de copa de coñac. Esto ayudará a la conservación de la mermelada, que es para lo que sirve también el limón.
Esta receta se puede hacer con otras frutas aparte de cerezas, pero si se usan otras habrá que ajustar tanto la cantidad de gelatina, como la cantidad de agua, como la cantidad de edulcorante, pues no es lo mismo hacer una mermelada de cerezas, que tienen mucho agua, que una de manzana que casi no tiene agua y está más dulce, o una melón que es casi todo líquido.
La cantidad de edulcorante también es opcional, pues depende mucho no sólo de la fruta que se use, también del grado de dulzor de la fruta en cada momento, pues por ejemplo, dentro de las fresas no siempre están igual de dulces.
Para que los tarros hagan bien en vacío, deben estar llenos hasta el mismo borde, pues si queda hueco en la parte alta del tarro, queda aire y el vacío no se hará correctamente.
Higos, zumo de limón como conservante natural, agar-agar como espesante natural y calor, es lo único que se necesita para hacer una mermelada increíble.
Para comenzar el día con un buen desayuno, te proponemos unas tostadas untadas con esta mermelada de fresa sin azúcar... riquísima.
Exquisita mermelada de pera aromatizada sobre yogur. Una solución perfecta para aquellos que no puedan consumir azúcar.
¿Quieres hacer tu propia mermelada en casa? Sigue los pasos de esta sencilla receta y en pocos minutos obtendrás una suave y rica mermelada de manzana.