Receta de Pasta rápida

Ponemos una cazuela con abundante agua al fuego y mientras se calienta, enjuagamos las espinacas y las escurrimos bien con un colador.

Cuando el agua comience a hervir, añadimos la pasta, un poco de sal, removemos y dejamos que se cueza a fuego medio el tiempo indicado por el fabricante (unos 10 ó 12 minutos).

Ahora, ponemos una sartén antiadherente al fuego con un chorrito de aceite, pelamos los dientes de ajo, los laminamos finos y lo sofreímos.

Pasados un par de minutos, añadimos las espinacas, sazonamos y dejamos que se sofría todo a fuego medio durante unos minutos más. Retiramos y mantenemos caliente.

En el momento en el que la pasta esté cocida, retiramos la cazuela del fuego, escurrimos y la pasamos directamente a la sartén con el sofrito de espinacas y ajo.

Rectificamos de sal, mezclamos bien, espolvoreamos con un poquito de queso en polvo y ya tenemos un plato de pasta rápida, fácil, rica ¡y muy sana!

Foto orientativa: Lesley Choa

Casi siempre uso cintas cuando quiero preparar una pasta rápida, porque es de las que menos tiempo tardan en cocerse, pero ni que decir tiene que puedes hacer esta plato con espaguetis, macarrones, rigatone... aunque con éstos el tiempo de cocción se suele incrementar un poco.

Si quieres reducir mucho, mucho el tiempo de cocción, puedes usar pasta fresca, que estará lista en un par de minutos. Eso sí, en ese caso, comienza por hacer el sofrito y cuando añadas las verduras a la sartén, pon la pasta fresca a cocer para que justo en el momento en el que tengas la pasta lista, el sofrito también lo esté y la puedas añadir directamente, y la pasta no tenga que esperar, pues ese es uno de los grandes errores que cometemos a la hora de cocinar pasta.

Yo las espinacas las suelo poner tal cual, pero si lo prefieres, una vez escurridas, las puedes pasar a una tabla de madera y con un cuchillo afilado, cortarlas para que queden más sueltas.