Ricos filetes de pechugas de pollo macerados y cocinados con salsa de limón, y aderezados con ajo, una pastilla de caldo y hierbas aromáticas.
Para hacer las pechugas de pollo al limón, primeramente exprimiremos un limón y la mitad del otro, y sumergiremos la carne en el zumo junto con un poco de perejil fresco y de albahaca, ambos bien picados, durante una media hora. Para ello, metemos las pechugas de pollo en un bol con el jugo de limón y el resto de ingredientes, las tapamos, y las metemos en el frigorífico.
El segundo paso consiste en dorar en una cazuela los dientes de ajo con el aceite de oliva justo, también muy picados. A continuación, echaremos el pollo con el zumo de limón y el perejil y la albahaca.
Sobre las pechugas, vamos a espolvorear una pastilla de caldo de pollo concentrado, y vamos a añadir otro chorro de aceite de oliva.
Tendremos el pollo en el fuego durante unos 25 minutos. A mitad de la cocción, les daremos la vuelta.
Cuando estén hechas, podemos servir las pechugas de pollo al limón con una ensalada verde, y con el medio limón sobrante cortado en rodajas, para adornar.
Foto orientativa: TheGirlsNY
En vez de pechugas de pollo, podríamos cocinar muslos de pollo deshuesados o cualquier otra parte de la carne del pollo, utilizando la misma técnica.
Ojo, esta receta no es la del pollo al limón chino, en la que la salsa queda mucho más gelatinosa y el resultado es completamente distinto.
Jugosas y sabrosas pechugas de pollo maceradas, cocinadas a la plancha para que sean más sanas, y acompañadas de salsa de limón y champiñones.
Fantástica y jugosa pechuga de pollo empanada al limón. El tiempo de maceración, será la clave, para conseguir un plato de carne impresionante.
El pollo en salsa de champiñones, con su nata, su cebolla y sus ajitos, es una de las formas más ricas y jugosas de preparar las pechugas de pollo.
Jugosos filetes de pechuga de pollo en salsa de tomate y cebolla. Una receta fácil, rápida y sabrosa. ¡Para chuparse los dedos!
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