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- Receta de risotto con calabaza
Con un sabor delicioso y suaves matices de color, este arroz cremoso o risotto con calabaza se convertirá en un primer plato sano para cualquier ocasión.
Para preparar el risotto con calabaza, empezamos por cortar la calabaza en trocitos, que reservaremos en un cazo grande.
A la calabaza ya cortada, le añadimos el chorizo, picado en trocitos pequeños y sin piel. A continuación le echamos la mantequilla y la cebolla picada en brunoise.
Lo cocinamos todo junto, a fuego lento, durante unos minutos. El tiempo de coción estimado será hasta que la calabaza esté bien cocida, aproximadamente 20 minutos.
Mientras se cuece la calabaza junto al chorizo, la cebolla y la mantequilla, vamos a preparar el arroz, ingrediente fundamental para este risotto con calabaza. Aprovechamos el caldo vegetal para ponerlo a cocer.
En una cazuela aparte, verteremos un chorrito de aceite virgen extra, que calentaremos a fuego lento y añadimos el arroz. Pasados 5 minutos, añadimos este arroz y parte del caldo vegetal bien caliente, a la primera cazuela, es decir, a aquella que contiene la calabaza con el chorizo y la cebolla.
Poco a poco, mientras se cocina todo junto, vamos a ir añadiendo un cucharon de caldo caliente. Hasta que se complete la cocción del arroz.
Para obtener un buen risotto con calabaza, tenemos que quedarnos con un risotto cremoso, pero sin líquido. Y para darle el toque final a este risotto con calabaza, bastará con espolvorear por encima un poco de pimienta molida, la mantequilla y el queso parmesano rallado. Servir caliente en el momento para que el arroz no se pase.
Foto y fuente: Italia Auténtica
Un buen risotto con calabaza y cebolla.
Si os gusta es posible substituir el chorizo fresco por trocitos de jamón ahumado (Speck), aproximadamente, unos 70 gramos.
Un delicioso risotto elaborado con arroz bomba y el toque especial de las boletus edulis, acompañadas de cebolla y queso rallado, que le da un sabor exquisito.
Con un poco de carne, vino blanco, caldo, cebolla y, como no, queso parmesano, podemos hacer un delicioso risotto cremoso sin muchas complicaciones.
Increíble plato de quinoa con calabacín, champiñones y anacardos. Todo ello regado con un toque de vino blanco, salsa de soja y queso parmesano.
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