Nada como las ensaladas con maíz para las épocas estivales y las noches de calor. Nos hidratan, nos permiten comer ligero y con mucho sabor.
Esta ensalada con maíz vamos a comenzarla limpiado las lechugas. Las ponemos debajo de un buen chorro de agua y luego las secamos, para que suelten exceso de agua y nos arruinen el sabor.
Troceamos las dos clases de lechuga, que por supuesto podemos sustituir por otras que nos gusten más, y las ponemos en una buena fuente.
A continuación escurrimos el líquido de la latita de maíz y se lo añadimos a las lechugas.
Lavamos y pelamos el tomate. Lo cortamos en rajitas finas y lo echamos al bol de la ensalada con maíz.
Llega el momento del aderezo que, en este caso será de lo más natural. Echamos un hilito de aceite de oliva, un poquito de sal, un toque de pimienta molida, un chorrito de vinagre (el de manzana le irá que ni pintado) y removemos bien.
Nos vamos con nuestra ensalada con maíz a la mesa y a disfrutar del refrescante plato.
Foto orientativa: goodiesfirst
Acompaña tus platos con esta fantástica y refrescante ensalada de maíz con pimientos y cebolla, y pondrás un extraordinario toque de color a la mesa.
Las ensaladas frías son el plan ideal para cenar una noche calurosa de verano, ya que nos aporta frescor y no es una receta pesada.
Deliciosa ensalada llena de sabores y mucho color, gracias a la lechuga, el tomate, el maíz, las anchoas, la cebolla, el queso y los palitos de cangrejo.
El pollo queda jugoso y crujiente si se cocina de esta forma, y no hay nada mejor para acompañarlo que una rica ensalada de maíz.
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