Receta de Focaccia con jamón y tomate

Empezamos hacer esta focaccia con jamón y tomate preparando la masa que es lo que más tarda debido a los tiempos de levados y fermentaciones que necesita. Para ello, en un bol (o sobre una superficie limpia de trabajo) ponemos la harina con la levadura y mezclamos. Añadimos el aceite y el agua y amasamos con las manos entre 5 y 10 minutos.

Hacemos una bola a la masa de la focaccia, la ponemos en un bol, tapamos con un paño húmedo y dejamos reposar hasta que doble su volumen, aproximadamente una hora.

Pasado el tiempo necesario, sacamos la masa con la que haremos la focaccia con jamón y tomate del bol y la partimos por la mitad. Amasamos cada parte por separado, damos forma nuevamente de bola, las colocamos en la bandeja donde las hornearemos (que tendremos forrada con papel de horno) y la aplastamos un poco hasta conseguir un grosor de unos 2 ó 3 cm.

Dejamos reposar otros 30 ó 40 minutos para que doble su volumen y cuando estén listas, encendemos el horno a 200ºC.

Ahora, con el dedo "agujereamos" la masa de la focaccia que rellenaremos de jamón y tomate. Hay que tener cuidado de no traspasar la masa, pues lo único que queremos hacer es marcar su superficie, formando pequeños hoyos en los que pondremos unas hojas de romero y tomillo secos. Espolvoreamos con un poco de sal y pulverizamos con un spray de aceite.

Dejamos la masa 15 minutos y a continuación, horneamos unos 20 minutos.

Mientras horneamos la focaccia, preparamos el jamón y el tomate con el que la rellenaremos. Para eso, rallamos los tomates en un cuenco, añadimos el ajo picado y un chorreón de aceite. Mezclamos bien y reservamos.

Cuando saquemos la focaccia del horno, dejamos que se enfríe un poco y seguidamente, la cortamos por la mitad. Untamos cada lado del pan con el tomate, rellenamos con finas lonchas de jamón serrano ¡y ya tenemos lista nuestra focaccia con jamón y tomate!

Foto y fuente: Tapas 2.0

Podéis aromatizar esta focaccia con otros especias si estas no os gustan o no tenéis.

La masa de esta focaccia con jamón y tomate no se dora mucho por la cantidad de aceite que lleva, así que no la dejéis en el horno más tiempo para que se dore mucho por que se quedará muy seca por dentro y tiene que estar muy tierna.