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- Receta de frijoles con chile
Ya sea como plato principal o como guarnición, seguro que estos sencillos y sabrosos frijoles serán los protagonistas de tu mesa en más de una ocasión.
La noche antes a preparar estos frijoles, los pondremos en remojo en una cazuela amplia y al día siguiente, los escurrimos, enjuagamos de nuevo y volvemos a cubrir con agua.
Añadimos a la cazuela el chile, dos dientes de ajo (pelados), la hoja de laurel y la mitad de la cebolla.
Llevamos al fuego los frijoles con el resto de ingredientes y dejamos que se cocine todo junto (removiendo de vez en cuando y añadiendo agua si fuese necesario) a fuego medio durante aproximadamente una hora y cuarto.
Pasado ese tiempo, retiramos la cebolla, los ajos, el chile y el laurel, añadimos la mitad de la manteca a los frijoles y dejamos de nuevo en el fuego otros quince minutos o hasta que los frijoles estén blandos. Retiramos del fuego y reservamos.
Mientras, en una sartén, preparemos el sofrito de estos frijoles y para eso, ponemos la manteca que nos queda a calentar y sofreímos el resto de la cebolla que tendremos picada en brunoise junto con el ajo, que estará pelado y picado finamente y una pizca de sal.
Lavamos y pelamos el tomate en concasé, lo añadimos al sofrito, rectificamos de sal, removemos con una cuchara de palo y dejamos unos minutos para que reduzca todo un poco.
Añadimos a la sartén un par de cucharadas de los frijoles cocidos, otras tres del líquido de la cocción, removemos, retiramos del fuego, pasamos el contenido a un vaso de batidora y trituramos todo hasta conseguir una salsa fina que añadiremos a la cazuela con los frijoles restantes.
Mezclamos todo y llevamos de nuevo la cazuela de los frijoles al fuego unos minutos para que todos los sabores se mezclen y la salsa espese un poquito.
Foto orientativa: joshuaheller
Pimientos verdes rellenos de queso y alubias pintas, acompañados de una rica salsa de tomate, guinda picante y nata.
Los frijoles charros o norteños son 100% comida mexicana, una deliciosa manera de preparar legumbres para tomarlas solas, o acompañar platos de carne.
Una riquísima base de frijoles puercos para acompañar cualquier tipo de platillo mexicano. Solo tendremos que dar el punto picante que más nos guste.
Disfruta de estos frijoles al estilo Tepatitlán acompañados con chorizo y sardinas. Un plato con un alto contenido nutricional muy completo y sabroso.