Receta de Helado de té verde

Tras preparar una taza de té verde, vamos a continuar con la elaboración del helado de té verde, lavaremos un limón y rallaremos su corteza, sin llegar a la parte blanca. Tras rallar la fruta, vamos a exprimirlo para sacar su jugo.

Una vez que la infusión de té verde esté a temperatura ambiente, la mezclaremos con la ralladura de la piel de limón y su jugo. Remueve bien, y añade la gelatina sin sabor, previamente mojada con agua fría.

Para finalizar, tenemos que añadir las yemas de huevo batidas y el agua. Ahora si, pondremos a enfriar la preparación. Con meterlo en el frigorífico durante un rato será suficiente.

Una vez que la masa del helado de té verde esté fría, vamos a añadir el azúcar y el queso en crema. Bate la clara de huevo a punto de nieve y agrégala al resto de la masa con movimientos suaves, hasta que quede completamente integrado.

Ahora que ya tenemos nuestro helado de té verde, sólo nos queda meterlo en el congelador durante un mínimo de 30 minutos. Pasado este tiempo, podrás ver que helado comienza a congelarse, pero para evitar que se cristalice, lo batiremos con ayuda de un robot de cocina o batidora eléctrica.

De nuevo mete el helado de té verde en el congelador hasta el momento de consumirse, y ves que de nuevo comienza a cristalizarse, tendrás que repetir la operación anterior, hasta obtener la textura deseada.

Foto orientativa: cl_03