En un momento, y sin complicaciones, cocinaremos esta deliciosa pechuga guisada con cebolla, que complementaremos también con unas ricas patatas.
En el momento de preparar la pechuga guisada, lo que hacemos es cortar la cebolla en concassé, pelar y partir en gajos las patatas, y hacer filetes de un grosor medio de las pechugas.
Una vez tengamos listos los ingredientes de este plato de pechuga guisada, ponemos una cazuela al fuego con un chorro de aceite. Cuando esté caliente, acomodamos dentro la carne salpimentada, y la hacemos, por ambos lados, hasta que coja color. En ese momento, la sacamos y reservamos.
Introducimos ahora en la cazuela la cebolla, y la pochamos hasta que empiece a transparentar. En ese momento, volvemos a incluir la carne, cubrimos con vino blanco, y añadimos también las patatas. Tapamos, y cocemos el conjunto durante unos 15 ó 20 minutos, o hasta que las patatas estén tiernas.
Transcurrido el tiempo de cocción, ya podremos servir esta pechuga guisada.
El pollo en salsa de champiñones, con su nata, su cebolla y sus ajitos, es una de las formas más ricas y jugosas de preparar las pechugas de pollo.
Jugosos filetes de pechuga de pollo en salsa de tomate y cebolla. Una receta fácil, rápida y sabrosa. ¡Para chuparse los dedos!
Con muy pocos ingredientes, en menos tiempo del que imaginas, puedes preparar unas deliciosas pechugas rellenas bajas en calorías y con mucho sabor.
Con esta receta conseguirás que las pechugas de pollo te queden jugosas y con un rico sabor agridulce. Los niños las devoran, y los no tan niños, también.
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