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- Receta de galletas saladas de queso
Queso curado rallado, harina y mantequilla son los ingredientes de estas fáciles y rápidas galletas saladas de queso.
En un bol amplio pondremos todos los ingredientes de nuestras galletas saladas de queso, es decir, el queso rallado, la harina tamizada y la mantequilla (que estará a temperatura ambiente) cortada en cuadrados y mezclamos.
Cuando la masa de las galletas saladas de queso sea más o menos uniforme, pasamos a una mesa de trabajo y terminamos de amasar allí, hasta conseguir una masa homogénea que estiraremos con la ayuda de un rodillo.
Dejaremos de estirar la masa cuando consigamos que tenga un espesor de poso más de un centímetro. En ese momento, ponemos el horno a calentar a 180ºC y mientras adquiere temperatura, empezamos a cortar nuestras galletas saladas de queso con la ayuda de un cortapastas.
Colocamos las galletas saladas en una bandeja de horno forrada con papel vegetal y pintamos con el huevo batido. Adornamos bien con semillas de sésamo o bien con pimentón (según tu gusto) y horneamos unos 20 minutos.
Sacamos, dejamos enfriar sobre una rejilla ¡y listas!
Foto orientativa: Hans
Si lo prefieres, puedes hacer estas galletas saladas de queso con otro tipo de queso, por ejemplo queso gouda o parmesano en lugar de queso curado, quedarán más suaves.
No hay nada mejor para picar y matar el gusanillo entre horas, que unas deliciosas galletas de queso saladas. ¿Quién se anima a probar la receta en su casa?
Siguiendo los pasos de esta receta podrás elaborar estos riquísimos lacitos de galletas saladas, en tu propia casa. Tan fáciles de hacer, como buenísimos.
Las galletas saladas gustan mucho a los pequeños y, como no son muy difíciles de hacer, son perfectas para la merienda o como aperitivo.
Con una granulada base y un rico relleno de queso, huevo y nata, esta tarta salada de queso hará las delicias de tus invitados, tanto fría como caliente.